Pero lo cierto es que no son un grupo vendible para niñitas, sino un poderoso combo de Hard Rock a la vieja usanza que está dejando un gran sabor de boca a los conocedores del rock de calidad.
En España, como siempre vamos a remolque, pues aún no son demasiado conocidos. Pero la verdad es que esta noche de sábado, por unas cosas o por otras, la Sala El Sol estaba casi a rebosar. Mucho roquero modernete de pose y también gente con ganas de escuchar buen rock, estabamos allí esperando ver una buena descarga y no nos defraudaron.
Salieron a escena bajista, guitarra y batería, que empezaron a tocar las primeras notas para presentar al cantante que salió a escena acompañado de una gran ovación.
No he machacado mucho el primer y único disco de estos irlandeses, «Rise», pero todos los temas sonaban muy potentes, aunque en mi opinión suenan mejor en el disco. En directo, sonaban un poco huecos, echando a faltar una guitarra rítmica que diese más cohesión a la contundente música del grupo.
Lo que no se puede criticar de ningún modo es la espectacular voz del cantante y su carisma en escena. El tipo, pelirrojo como buen irlandeś, con un aspecto similar al Joe Coker de woodstock, aunque con más pelo, es un animal de escena y movió al público de un modo increible y con sus juegos vocales logró ponernos los pelos de punta a más de uno.
Temas como «Under the Sky», «Come, follow me» o «Never too late» sonaron tremendos, y el bis lo cerraron con una una versión de Aerosmith y con su tema «Always on my mind», dejando a todo elmundo con un gran sabor de boca.
En mi opinión, les falta todavía pulir un poco su sonido, pero pueden ser muy grandes si siguen así. ¿Salvarán ellos el Rock’n Roll? Habrá que verlo…
