Cada día vivir en Madrid se convierte más en un suplicio. La ciudad se vuelve hostil para sus habitantes, y la gente cada día vive menos la calle. Por si fuera poco, la cultura vive cercada por los gobernantes. Cada vez hay menos iniciativas culturales que merezcan la pena, que sean realmente cultura libre y popular, al acceso de todos.
Algunos dirán: «Pero si se hacen conciertos…» Sí, Shakira y Alejandro Sanz tocan en Las Ventas (y bien que engrosan las arcas municipales…), pero las salas pequeñas donde tocan los grupos que comienzan, tras dejarse la vida en los locales de ensayo, son hostigadas y obligadas a cerrar un dia sí y otro también.
Otros pueden decir: «Pero si la gente si vive la calle». Las procesiones y las manifestaciones del «Foro de la Familia» son una cosa y las cargas policiales en Malasaña, las prohibiciones de las fiestas populares y la ley antibotellón son otras.
En Madrid se hacen iniciativas interesantes que duran poco y se impide todo lo que suene a popular y alternativo. Eso sí, queda muy bien anexionarse dos eventos como el Universimad y el Cultura Urbana, que han partido de inciativas privadas, y decir que las Fiestas de San Isidro son «para la juventud».
Me hierve la sangre. Y cada día más. Los auditorios y las plazas de los barrios, salvo escasas excepciones, están desaprovechados. Los espacios públicos cada vez son menos públicos. La ciudad es un estado policial. Policía por todas partes, porque dicen que la ciudad no es segura, y cada vez menos, parece ser.
Pero a nuestro alrededor parece que no se dan cuenta, porque sin ir más lejos en Getafe, que está al ladito de la capital, hacen unas pedazo de fiestas patronales que duran dos semanas y que son realmente para todos los públicos. Y gratis. O en Rivas-Vaciamadrid se fomenta la música entre la juventud con Escuelas Municipales de música o Locales de Ensayo
Y cuando una sala realmente alternativa como La Plaza de las Artes es obligada a cerrar (aunque por fin han vuelto…), cuando un grupo que deseabas ver va a tocar en una sala y la cierran dos días antes y te das cuenta que encima va a peor, se te saltan las lágrimas al descubrir que hay sitios en los que la cultura se entiende como lo que es. Y que hay que enseñar a la gente lo que hacen sus vecinos para poder integrarlos. Y parece que todavía puede haber esperanza… si te vas a vivir a Francia.
En la maravillosa ciudad de Toulouse se celebra un festival que cada año se dedica a un río, y por extensión a la cultura de un país: Rio Loco Festival.
En el próximo post procederemos a analizarlo en profundidad.
Escuchando: www.radiocarcoma.com – «Asilo de Lunátikos» (viernes de 21 h. hasta el infinito)